El hijo de Kirsten Dunst sufrió un grave problema de salud mientras ella filmaba en Budapest.
La actriz de 43 años y su esposo Jesse Plemons alquilaron inicialmente una casa en la ciudad con sus hijos Ennis, de siete años, y James, de cuatro, mientras ella filmaba The Entertainment System Is Down, pero sus planes tuvieron que cambiar cuando su hijo menor cayó gravemente enfermo.
Aunque Kirsten se negó a compartir detalles pero enfatizó que todos están bien ahora, Jesse, de 37 años, y los niños regresaron a Los Ángeles, dejando a la estrella de Virgin Suicides sola en Budapest durante meses, una situación que comparó con la película Destino Final.
Ella le explicó a la revista Town and Country: "Donde estás imaginando todas las cosas que podrían salir mal, los peores escenarios que le podrían pasar a tu hijo. Nunca he visto esa película. Pero conozco el concepto. Así se siente ser madre a veces".
A pesar del momento estresante para todos ellos, Kristen admitió que los problemas de salud de James "los unieron como familia de una manera mucho más profunda".
Y pronto, la familia se dirigirá a las Bahamas después de prometer llevar a sus hijos de vacaciones "a cualquier lugar al que James quisiera ir".
El joven le dijo a sus padres: “Quiero ir a una playa donde mi castillo de arena no se lo lleve el agua".
La actriz de Power of the Dog aparecerá próximamente en Roofman, y aunque está encantada con la cinta, no pudo evitar mirar su teléfono durante una de las proyecciones porque quería vigilar a su familia.
Ella admitió: "Quería asegurarme de que todo estuviera bien".
A pesar de sus años de éxito en Hollywood, Kirsten insistió en que su vida no es tan glamorosa como la gente podría pensar.
Ella se rió: "Conduzco un Volvo con dos asientos para niños en la parte trasera. Es nuestro coche para adultos. Jesse conduce el viejo Lexus de su familia, sin asientos para niños".
Kirsten admitió anteriormente que rara vez tiene tiempo para ella misma debido a que tiene dos niños pequeños.
Ella le dijo a la revista PEOPLE: "Cuando todos están dormidos, puedo ver los programas que quiero, como The Bachelor. Pero, sinceramente, ni siquiera una ducha es sagrada a estas alturas. Nada lo es".
La estrella de Virgin Suicides agregó cuando se le pidió que describiera su último día libre "perfecto": "Cuando tienes dos hijos, nunca tienes un día libre. En este momento es como estar en un avión sin wifi. Y la gente te trae comida. Es como un día de spa para una madre".
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