Seis cabezas cortadas fueron descubiertas en una carretera en el centro de México, lo que desencadenó una importante investigación que surge después de que Trump propusiera enviar tropas estadounidenses a México para combatir el narcotráfico.
El macabro hallazgo fue realizado por autoridades locales temprano el martes por la mañana en un área que normalmente es tranquila y no vinculada con la violencia de los cárteles.
La carretera donde se descubrieron las cabezas cortadas conecta los estados centrales de Puebla y Tlaxcala, informa el Mirror UK.
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Las autoridades aún no han proporcionado un motivo detrás de los asesinatos, ni han revelado detalles sobre qué organizaciones criminales que operan en México podrían haber sido responsables del horrible acto.
Según medios locales, en la escena del crimen se dejó una manta con un mensaje que advertía a las bandas rivales. Supuestamente, estaba firmada por un grupo llamado "La Barredora".
"La Barredora" es el nombre de una banda criminal menos conocida que opera en el estado occidental de Guerrero, sin embargo, no hay claridad sobre si el cártel estuvo detrás del ataque o cuál fue su motivo.
La Fiscalía de Tlaxcala, que ya inició una investigación sobre los impactantes asesinatos, afirmó que las cabezas encontradas en Tlaxcala eran de hombres.
Las autoridades federales aún no han emitido un comentario oficial sobre los asesinatos.
Se desconoce el motivo de los asesinatos.
Además del narcotráfico, la región se ve afectada por el contrabando de combustible, también conocido como "huachicoleo", que genera miles de millones de dólares anuales para las bandas responsables de esta nefasta actividad ilegal. Esta sombría noticia llega en medio de una importante ofensiva contra el tráfico de fentanilo por parte del gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Tlaxcala y Puebla, situadas a poco más de 62 millas (100 kilómetros) de la Ciudad de México, no suelen estar sujetas a este nivel de violencia extrema de los cárteles que se observa en otras partes del país, y ambos estados centrales son conocidos por su relativa paz.
De hecho, Tlaxcala solo representa el 0.5% del total nacional de 14,769 homicidios dolosos registrados entre enero y julio, mientras que Puebla contribuye con el 3.4%. Sin embargo, las autoridades han reconocido que estos estados enfrentan problemas como el movimiento de grupos criminales dedicados al tráfico de personas y drogas, así como el robo de combustible, debido a su ubicación geográfica central.
El mensaje en la manta emitía una advertencia.
En 2022, autoridades de Puebla descubrieron a 116 migrantes de diversas nacionalidades que eran transportados en un camión.
En Sinaloa, un estado asolado por la violencia de pandillas y el crimen, en junio de este año fueron encontrados 20 cadáveres de hombres con heridas de bala en un puente sobre una carretera federal, cinco de los cuales estaban decapitados.
Mientras tanto, en mayo, un tiroteo en un festival de una iglesia católica en el estado central de Guanajuato ocasionó la muerte de siete jóvenes mexicanos.
México ha experimentado un aumento dramático de la violencia entre cárteles en los últimos años, con cientos de miles de personas asesinadas y decenas de miles desaparecidas, desde que el gobierno del país desplegó por primera vez al ejército mexicano contra las pandillas en 2006.
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