¿Qué harías si un día, así casual, te cruzas con uno de los memes más famosos del internet? Eso le pasó a varios pilotos de Fórmula 1 durante el Gran Premio de Hungría 2025, donde conocieron en persona a András Arató, mejor conocido como Hide the Pain Harold.
Sí, el mismísimo señor de sonrisa incómoda que has visto en miles de memes, stickers de WhatsApp, tuits random y como respuestas a situaciones decepcionantes que resumen la existencia adulta con esa sonrisa que no da confianza, incomoda.
Los pilotos estaban igual de en shock que tú
Arató fue invitado al GP de Hungría como celebridad nacional (porque lo es) y convivió con los pilotos como toda una leyenda del internet. La reacción del piloto francés Isack Hadjar fue la más épica:
“¡El meme!”, dijo Hadjar
El piloto francés se emocionón mientras soltaba una risa nerviosay se acercaba para pedirle una foto como fan total.
También Fernando Alonso y Gabriel Bortoleto (de Sauber) aprovecharon la oportunidad de tomarse la selfie más surrealista del paddock. Y es que no todos los días conoces a una figura que ha vivido más en la memoria colectiva del internet que muchas celebridades.
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Por si no lo sabías, esta no es la primera vez que András va al GP de Hungría, pero este año la Fórmula 1 lo celebró como la celebridad que es en sus redes sociales.
¿Quién es András Arató y cómo se convirtió en ‘meme’?
András Arató nació en Hungría en 1945. Todo comenzó con un viaje a Turquía con su esposa, en el que un fotógrafo vio su rostro y le propuso hacer fotos de stock.
“No supe qué decir porque aquello estaba muy lejos de mi forma de ser… pero había algo en mi expresión que le llamó la atención”, contó en entrevista con Vanity Fair.
Lo que parecía una sesión fotográfica más, se convirtió en un fenómeno mundial. Internet encontró las imágenes y las convirtió en algo más: memes sobre sufrimiento existencial con sonrisas incómodas.
Al principio, Arató no estaba tan feliz con su fama viral:
“Descubrí los primeros memes. Algunos eran muy divertidos… pero otros eran repugnantes. Aquello fue como una descarga eléctrica en mi cabeza”, confesó.
Incluso intentó frenar la viralización de sus imágenes, pero ya era demasiado tarde. Lo que siguió fue aceptar el meme y abrazar su nueva vida como figura pública.
“Al principio me enfadé, pero ser viral me ha cambiado la vida y ahora tengo un montón de amigos”, dijo Harold con su clásica sonrisa que lo dice todo… y nada a la vez.
El internet es real (y lo sabe la Fórmula 1)
Este encuentro en Hungría nos recuerda que los memes también tienen nombre, historia y, en este caso, 80 años de carisma húngaro.
Y sí, si algún día ves a Hide the Pain Harold en la calle, ya sabes lo que tienes que hacer: sonríe, pídele una foto y disimula el existencialismo.
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